Modernismo y Natura: La Colonia Güell

Con una nueva edición del programa televisivo Batalla monumental, Catalunya busca averiguar cuál es el monumento preferido de los catalanes y las catalanas. Un programa en el cual diferentes monumentos del país compiten para levantarse con este reconocimiento.

Vamos descubriendo los monumentos que compiten en esta edición, para saber algo más sobre su historia y características. Después de descubrir el Castell de Mur, el Castillo de Montsoriu, las murallas de Montblanc y las de Cervera, y lo Palau de la Música Catalana, hoy conocemos algo más la Cripta y Colonia Güell, que compite en la "Batalla Modernista".

La Colonia Güell era una colonia industrial que se dedicaba a la fabricación de panas y terciopelos. Situada en la comarca del Baix Llobregat , pertenece al municipio de Santa Coloma de Cervelló. Destaca por el hecho que es una de las colonias más grandes del Llobregat, y por su calidad arquitectónica.

La colonia fue declarada Bien Cultural de Interés Nacional en 1991, en la categoría de Conjunto Histórico. Uno de sus tesoros, la iglesia, de lo contrario llamada cripta de , Gaudífue declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2005.

El tándem que define la Colonia Güell es Natura y Modernismo . Su construcción empezó el 1890 por iniciativa del empresario Eusebi Güell y Bacigalupi, propietario del terreno, a la antigua finca Can Soler de la Torre, que había comprado su padre, Joan Güell, años antes en el municipio de Santa Coloma de Cervelló. Güell trasladó todas las industrias que antes tenía ubicadas al Vapor Vell de Sants (Barcelona).

Eusebi Güell quería poner los trabajadores en un ambiente más rural y evitar las tensiones sociales que se vivían a Barcelona y en otras poblaciones industriales catalanas a finales del siglo XIX. Este capítulo, en plena revolución industrial, pasó al mismo tiempo que lo papa León XIII publicaba el encíclica Rerum novarum. En este texto se constata que la Iglesia veía el mundo obrero amenazado por el socialismo y el anarquismo, que defendían el ateísmo. Los Güell, en linea con el que proclamaba el papa, colocaron para los obreros todos los servicios que creían que necesitaban para su vivencia cristiana.

Eusebi Güell encargó al Gaudí proyecto de la Colonia, que contaba con hospital, fonda, escuela, comercios, teatro, cooperativa y capilla, además de las fábricas y las viviendas de los obreros, en una superficie total de unas 160 hectáreas. Gaudí contó con la colaboración de sus ayudantes Francesc Berenguer y Mestres, Joan Rubió y Josep Canaleta. Personalmente, se encargó del diseño de la iglesia, de la cual tan solo se construyó la cripta, puesto que a la muerte del conde Güell, el 1918, sus hijos abandonaron el proyecto.

El resto de edificaciones fueron a cargo de los colaboradores de Gaudí. El conjunto hace gala de las novedades constructivas del momento cómo el uso del quebradizo de cerámica, el hierro y el ladrillo. Hace falta poner especial atención en las fachadas de la casa del maestro, Can el Espinal y Can el Ordal, que muestran que, a pesar de ser una arquitectura funcional, no se olvida de los detalles.

Los sucesores de Eusebi Güell vendieron la propiedad el 1945 a la familia Bertrand y Serra. La industria textil, ante la crisis del sector, fue cerrada el 1973.

La Cripta

Si hablamos de la Cripta, Gaudí proyectó una iglesia de planta oval de 25 × 63 metros, con cinco naves, una central y dos más a cada lado, con varias torres y un cimbori de 40 metros de altura. Ideó un conjunto plenamente integrado a la natura, conforme al concepto que Gaudí tenía de la arquitectura como estructura orgánica.

La cripta de la Colonia Güell sirvió a de Gaudí banco de pruebas donde experimentar estas nuevas soluciones estructurales ideadas por él, que después aplicó a obras cómo la Sagrada Familia.

Fue consagrada el 3 de noviembre de 1915 por el obispo de Barcelona, Enric Reig y Casanova, dedicándose al Sagrado Corazón de Jesús. Años más tarde, durante la Guerra Civil, fue asaltada e incendiada el 19 de julio de 1936, hecho que provocó que se perdieran numerosos planos y documentos dejados por Gaudí, así como la maqueta polifunicular original. Destinada a almacén, el 1939 fue restaurada, convirtiéndose en parroquia el 20 de julio de 1955 con la bendición del obispo de Barcelona Gregorio Modrego.

Entre el 1999 y el 2002 la cripta fue restaurada de nuevo y se sustituyó la cubierta, obra de la Diputació de Barcelona y los ministerios de Cultura y Fomento, bajo la dirección del arquitecto Antoni González Moreno-Navarro. El 2005 la cripta de la Colonia Güell fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.