Primera propuesta de ruta del año: el Mirador de La Figuerassa

¿Queréis empezar el año con una ruta que te permitirá disfrutar de unas vistas espectaculares? Si es así, la ruta hacia el Mirador de La Figuerassa es el que estás buscando.

Este mirador se encuentra en el Berguedà, en pleno Pirineo, a 1550 metros. De hecho, hay dos miradores circulares, los cuales te permiten ver el Santuario de Queralt, el pantano de la Baells, la ciudad de Berga y las montañas de Montserrat, Puigllançada y el Sobrepuny.

 

La ruta al Mirador de Figuerassa

Es una ruta fácil que puedes hacerla tanto a pie, en bici o en coche. Si empiezas desde el parking de la Fuente Negra, son 12 km y un desnivel de 700 metros. Si, en cambio, la empiezas desde la pista forestal, son 8 km. Si 8 km os parecen demasiado, tenéis unos cuántos parkings por el camino, el cual os permite aparcar más arriba y coger el camino desde allá.

La ruta se realiza por gravilla en muy buen estado, por lo tanto, no tendríais que tener ninguna dificultad. Durante el camino os encontraréis paisajes preciosos y pasaréis por un bosque de hayas y otros árboles caducos.

Cuando estéis a punto de ser al mirador, llegaréis a una zona de parking asfaltada. A partir de allá, solo os quedarán 500 metros.

Un golpe llegado arriba, podréis disfrutar de las vistas que os ofrecen los dos miradores.

 

Otras propuestas por los alrededores

Y si no habéis tenido bastante, podéis hacer alguna visita por los alrededores como por ejemplo:

• El Santuario de Queralt: a solo media hora en coche, con parking gratuito y muy fácil de llegar. También podréis disfrutar de unas vistas espectaculares.

• El Pantano de la Baells: también a media hora en coche. Muy recomendable ir en verano y hacer actividades acuáticas cómo kayak o paddle surf.

• Cueva del Hallazgo: un oratorio conocido como la Cueva de Santa Helena, donde la tradición sitúa el hallazgo de la imagen de la Virgen María de Queralt por un pastor. A 100 metros del Santuario.

 

Visita Solsona

A solo 1 hora tenéis Solsona. Os recomendamos ir a pasar allá la noche y pasear por la ciudad el día siguiente, donde podréis visitar:

• La catedral de estilo románico, gótico y barroco.

• Las Torres de las Horas, cada una tenía una función; una que avisaba del fuego y el otro de la hora.

• El Pozo de Hielo, el cual resultó muy útil en su momento. En los meses más fríos el hielo se almacenaba y se conservaba en el interior, y se comercializaba desde la primavera hasta Todos Santos.

• Y mucho más.

Para poder tener fuerzas el día siguiente, os habrá que descansar. Un hotel situado en el centro de la ciudad es el Hotel Santo Roc. El hotel te transporta a la época modernista gracias a su decoración tanto interior cómo exterior. También te ofrece la posibilidad de SPA y masajes, que nunca está de más. Y otro de sus puntos destacables es su restaurante exquisito.

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