Mora de Ebro me gusta!

Móra d'Ebre es la capital de la comarca de la Ribera de Ebro, a las Tierras del Ebro. Situado a la orilla derecha del ríe Ebro, entre el paso del Asno y el de Barrufemes, al municipio viven más de 6.000 personas.

Los orígenes de la villa se remontan además de 6.000 años atrás, al neolítico, concretamente en la cultura de los sepulcros de fosa, documentada por el doctor Pere Bosch y Gimpera. Los ibers crearon en Móra d'Ebre las primeras entidades de poblamiento, como así lo demuestran los restos arqueológicos del poblado del Calvario. Del largo periodo de la romanización no quedan restos monumentales disparo de los vestigios a la villa romana de los Emportells, situada cerca del río.

Ya los árabes dejaron una fuerte impronta en la vida local: explotaciones agrarias, industria bladera, artesanía del barro y un castillo, que formaba parte de la línea defensiva del Ebro y que a lo largo de la historia ha sufrido sucesivas destrucciones y posteriores reconstrucciones. Durante la edad mediana, la villa formó parte de la llamada baronía de Entença, la cual se enfrentó contra los templers de Miravet y Ascó, los cuales dominaban la orilla derecha del río. Una lucha que causó graves daños en la comarca, como también lo hicieron las guerras posteriores: la de los Segadores, la de Sucesión, la del Francés, las carlines y la Guerra Civil española.

Otros acontecimientos cruciales que afectaron el venidero de Mora y su comarca fueran la expulsión de los moriscos, en 1610 y la segregación de los Cortijos de Mora para constituir la población de Móra la Nova, en 1830.

Enla actualidad, entre los edificios de interés histórico-artístico podemos, a la cumbre de un cerro encima del ríe Ebro, los restos del castillo de Mora, de origen islámico, casa de los Entença y de los Duques de Cardona. La iglesia prioral de San Juan Baptista se encuentra ubicada en la plaza de Bajo donde había habido el primer puerto fluvial, la primera barca. La plaza acoge también la casa de la villa.

En la plaza de Arriba, situada en el centro de Móra d'Ebre, hay la estatua dedicada al escultor hijo de la villa Julio Antonio, obra realizada por el también escultor morenc Santiago Costa, y la Casa Montagut, setcentista. El convento de las Mínimas, construido en 1883 y fundado por sor Filomena Ferrer, hija del escultor Fèlix Ferrer de Móra d'Ebre, es otro de los edificios que se pueden ver.