La Bisbal d'Empordà me gusta

Es la capital del Baix Empordà y es uno de los centros terrissers más importantes de Cataluña

La Bisbal d'Empordà es la capital de la comarca del Baix Empordà, y se encuentra a la llanura de la Ampurdán, adyacente al macizo de las Gavarres y regado por el río Daró. Limita al norte con Corçà y Ullastret, al este con Forallac y al oeste con Cruïlles, Monells y Sant Sadurní de l'Heura. La sierra de los Perdidos, con la ermita de Santa Llúcia de l'Arboç, es la frontera natural del sur del término.

Los orígenes de la villa hay que buscarlos en varias villas romanas que se esparcían por el territorio que acontecería el término de la Bisbal. Estos lugares ya eran propiedad de los obispos de Girona en 881. El obispado se encargaba de la organización civil y eclesiástica del territorio, gobernado probablemente por un vizconde. Entonces la población ya recibía el nombre popular de la Bisbal, en referencia a los obispos, que construyeron un castillo en el siglo XI.

En cuanto a la climatología, el lugar tiene un clima mediterráneo, con disparos característicos de la zona prelitoral. Las temperaturas oscilan, normalmente, entre los 30/35 °C de máxima en verano, y los 0/-5 °C de mínima en invierno. La media anual es de 15 °C. La Tramuntana es el viento dominante y más característico, y el régimen de precipitaciones se caracteriza por su irregular distribución.

La ciudad conserva un interesante núcleo de calles estrechas, con numerosos edificios y elementos arquitectónicos dignes de ser visitados. El edificio más emblemático y significativo es su castillo palacio, verdadera joya del románico civil catalán. Otros elementos patrimoniales remarcables son la calle del Callo (barrio judío), callejón estrecho y oscuro en forma de zigzag; la iglesia de Santa Maria (1701-1757), edificio de grandes dimensiones de una sola nave con capillas laterales y de estilo barroco; la iglesia de la Piedad (1788) y la monumental reja y puerta de hierro forjado de la iglesia de Dolors (1750), las dos de un vistoso barroquismo, y el puente Viejo (1606), el más antiguo de los tres puentes sobre el Daró. Las Vueltas, conjunto de casas porticadas proyectadas en el siglo XIX, son un disparo característico de la trama urbana.

Tradicionalmente la agricultura y la ganadería han sido una de las primeras fuentes de riqueza del municipio. A comienzos del siglo XX, hay que destacar el despuntament de la industria del corcho. Actualmente el barro, la cerámica industrial y artística representan los puntals de la economía bisbalenca. Y es que la Bisbal es uno de los centros terrissers más importantes de Cataluña.

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