A Tiana, el 12 de septiembre de 1984, moría Dolores Anglada y Sarriera. Nacida en la ciudad condal el 28 de octubre de 1892, la narradora infantil y dibujante era conocida como Lola Anglada, y es considerada la última de los clásicos ilustradores de la escuela catalana de principios de siglo XX y una de las escritoras más importantes de la etapa de la preguerra.
Fue una artista polifacética, y además de escritora y autora teatral, fue decoradora, ceramista, pintora, escultora, figurinista y dibujante, de una gran sensibilidad y un fuerte sentimiento nacionalista.
Entre otros reconocimientos a su tarea, recibió la Medalla al Mérito Cultural de la Diputació de Barcelona (1975), la Medalla del Fomento de las Artes Decorativas (1980) y la Cruz de Sant Jordi (1981).
Su fondo personal se conserva en la Biblioteca de Catalunya, la parte más importante de los original de sus dibujos se conservan a la Diputación de Barcelona, y al Archivo Fotográfico de Barcelona se conserva la mayoría de su fondo fotográfico.